Orbegozo RRM 810 – Emisor térmico sin aceite, 5 elementos, 800 W
Orbegozo RRM 810 – Emisor térmico sin aceite, 5 elementos, 800 W
5 elementos.
Potencia 800W.
Medidas: 585 x 490 x 75 mm.
(alto x ancho x fondo)
Peso: 5,44 kg
Los emisores térmicos son un tipo de calefacción fija que funciona conectándose a la red eléctrica. Habitualmente el material con el que se fabrican es el aluminio dado que el radiador debe ser un buen conductor térmico y este material tiene un factor de transmisión del calor muy elevado.
Son programables y funcionan repartiendo el calor gradualmente. Realizan un gasto menor que cualquier otro sistema de calefacción eléctrico por su inercia térmica, es decir, porque son eficientes al mantener el calor (y, por tanto, necesitan menos energía para seguir calentando) durante más tiempo que los sistemas eléctricos convencionales. Además, necesitan un 30% menos de potencia, y por tanto, de consumo.
Ventajas
– Fácil instalación: se colocan sobre unos soportes atornillados a la pared y se conectan a la red eléctrica.
– Es un sistema de calefacción que no reseca el ambiente ni genera humos, gases ni olores.
– Confort: es un calor limpio; con los emisores termoeléctricos no hay llama y se integran bien en el ambiente. El método de radiación, que caliente el aire, que usan estos emisores es más confortable que el de convención (ejemplo: un radiador tradicional).
– Eficiencia: incluyen un programador (los puedes usar según tu conveniencia para que se ponga en marcha a determinadas horas del día, para encenderlo unas horas concretas) para consumir solo en función de la temperatura elegida y durante las horas programadas.
Tipos de emisores térmicos
Los emisores termoeléctricos se clasifican en tres tipos:
– Los secos: calientan unos paneles internos (normalmente de mica) que acumulan el calor; proporcionan calor al instante ya que se calientan de forma rápida. Lo normal es que este tipo de emisores tengan una inercia térmica media (mantienen el calor) de una hora, es decir, que están emitiendo el calor durante ese tiempo. Si necesitas calor durante un tiempo más prolongado es mejor que optes por uno de los otros tipos. Ideales para habitaciones que debas calentar rápidamente y durante un tiempo concreto.
– Los de fluido: cuentan con un líquido interno (fluido caloportador) que circula por el emisor y lo caliente de modo más uniforme. Este tipo de emisor calienta de manera más lenta que el emisor seco, pero tiene una inercia térmica (mantienen el calor) más larga que puede llegar hasta las 4 horas. Son ideales para un uso continuo de entre 5 y 8 horas al día y apropiados para instalaciones completas.
– Los cerámicos: son los emisores que más tardan en alcanzar la temperatura máxima, pero también son los que mantienen el calor durante más tiempo porque su inercia térmica es la más elevada. Se recomienda para uso continuo de más de 8 horas al día y para cualquier tipo de instalación.
¿Qué es un emisor térmico?
Un emisor térmico es un aparato de calefacción que tiene la particularidad de precisar de una toma eléctrica para poder funcionar. Suelen fabricarse con material aluminio, debido a que el radiador conduce muy bien la electricidad gracias a que, en su interior, dispone de un buen conductor térmico.
El nivel de calor que consiguen es uniforme; evitando que queden zonas más frías que otras. Tienen un mínimo gasto asociado (consumen mucho menos que otros aparatos de calefacción relacionados) ya que no necesitan de tanta potencia como para poder funcionar (se calcula que hasta un 30% menos que otros sistemas; por ejemplo, si te estás preguntado sobre si comprar un radiador de aceite o emisor térmico, los primeros serán mucho más eficientes).